En rebajas, evita comprar compulsivamente
¿Has pensado cuántas rebajas hay a lo largo del año? Si bien enero y julio siguen siendo los meses de rebajas por excelencia, también contamos con descuentos de temporada, Black Friday y promociones de Navidad. Ante esta avalancha de ofertas, es difícil no caer en alguna que otra compra compulsiva.
En Gana Estilo somos partidarios de las compras inteligentes, por eso hemos elaborado una lista de pautas que te ayuden a evitar la shoppingmania.
5 PASOS PARA EVITAR LAS COMPRAS COMPULSIVAS EN REBAJAS
1. Haz la lista de la compra
Por muy aburrido que parezca, hacer una lista de la compra es tremendamente eficaz. Te ayuda a organizarte para que la experiencia de consumo sea rápida y te lleve al resultado deseado. ¿Qué deberías incluir en tu lista? Desde prendas de vestir y accesorios básicos que sueles llevar, hasta artículos que consideres necesarios para completar tus looks diarios. De esta manera, reducirás considerablemente la tentación de comprar por deseo
2. Establece un presupuesto
Según la Organización Mundial de la Salud, alrededor del 8% de la población mundial padece el trastorno de compra compulsiva, también llamado oniomanía.
Una de las características definitorias de un comprador compulsivo es el remordimiento. Para evitarlo, es fundamental establecer de antemano cuánto estás dispuesto a gastar y, a la hora de comprar, procurar ceñirte al presupuesto. Si has superado tu límite de gasto, ¡da por concluida la sesión de shopping y, si es necesario, retómala unos días más tarde, después de planear atentamente tus siguientes pasos! Igualmente, es esencial no dejarte presionar por el clásico “¡Date prisa, se acaban las rebajas!”
3. Conoce las estrategias de marketing
Hablando de estrategias de marketing, es recomendable familiarizarse con ellas para evitar su influencia.
Uno de los trucos más utilizados es el de las superofertas. Descuentos impresionantes de hasta un 90% y la promoción de 2 por 1 suelen ser bastante golosos, especialmente para los compradores compulsivos. Aparte del precio, el ambiente también cuenta como catalizador de una compra por impulso. La música y el perfume de la tienda te invitan a pasar más tiempo mirando, probando e incluso fantaseando. Es una estrategia sensorial, igual que la del escaparate.
4. El maniquí vs. tú
Los expertos en visual merchandising saben lo que hacen. El maniquí del escaparate lleva una prenda de vestir o accesorio que te encanta. Es la reacción que se espera de ti como posible comprador, pero ¡no te dejes seducir tan pronto!
A veces, la puesta en escena gusta más que el producto en sí. Si hablamos de ropa o complementos, es posible que sientas atracción por el look completo o por cómo luce la prenda de vestir en el maniquí. Por lo tanto, para evitar comprar la historia en lugar del producto, ¡ten siempre presente tu estilo personal y la ropa de tu armario, así como tu constitución física que puede ser diferente a la del maniquí!
5. Prepárate para afrontar "el enamoramiento"
Ese momento en el que te enamoras de una prenda de vestir que no está en tu lista o supera tu presupuesto con creces. Es cuando preguntas retóricas del tipo “¿qué sería la vida sin estas pequeñas alegrías?” te vienen a la mente y te impulsan a sacar la tarjeta de crédito. Para no caer en la trampa de una compra compulsiva, debes pensar detenidamente si el objeto de tu deseo se merece un lugar en tu vida. En este caso, es recomendable considerar la calidad y la funcionalidad del producto rebajado. Si resulta que, lejos de ser una buena inversión, es más bien un síntoma de la fiebre de las rebajas, ¡cúrate antes de caer en el típico vacío de los compradores compulsivos!”
Como podemos ver, hay que afrontar la temporada de rebajas con preparación y seriedad, especialmente si tienes un historial de compras compulsivas. Si empiezas por lo más sencillo, como hacer una lista y establecer un presupuesto, acabarás disfrutando de tu sesión de shopping sin remordimientos.