Estilo Personal

Este estilo es un largo viaje de auto-descubrimiento
Son frases que repetimos a diario. Pueden ser éstas u otras, pero de lo que se trata es de hacer callar esa voz de tu interior que te dice que no eres suficiente.

¿En cuál de estas frases te ves más reflejada?

La mía era una de fingida indiferencia: Es que a mí la moda ni me va, ni me viene. La verdad es que no sabía de moda y las tendencias no me interesaban en absoluto. La ropa era solo útil y necesaria.

Detrás de esa indiferencia había falta de conocimiento y – ¿por qué no admitirlo? – una pequeña dosis de arrogancia. Para que me tomaran en serio, tenía que rechazar lo que la mayoría de la gente tachaba de superficial. 

¿Por qué dejé de pensar así?

Porque me di cuenta de que mi imagen me influía en muchos aspectos. A veces, la imagen del espejo se convertía en mi influencer emocional. Y de cara a una reunión – profesional o de amigos – la moda era mi reloj.

También es el tuyo.

Es la que marca si vas a llegar a tiempo a una entrevista de trabajo. La que influye en tu estado de ánimo tras una reunión. La que decide si te mereces el puesto. La que invita, transmite, convence o emociona.

Por supuesto, no es lo único que importa. Tienes mucho más que transmitir que un simple escaparate. Pero tu imagen es tu primer mensaje.

Cuidarte y vestir bien no implica ser una gran amante de la moda y apilar revistas Vogue en tu mesita de noche. No tienes que convertirte en una entendida en las tendencias para tener estilo.

Entonces, ¿por dónde empezar? La respuesta es simple. ¡Encuentra tu estilo personal! Eres única y tu ropa tiene que ser el reflejo de esa unicidad que te caracteriza, de tu esencia propia.

A continuación, te daré las claves para que empieces a crear un estilo propio que te diferencie de los demás.

¿Por qué tu tipo de cuerpo Kibbe es la clave de tu estilo?

Algunas personas no llegan a conocerse nunca y, por tanto, no pueden identificar lo que les gusta o les sienta bien. El autoconocimiento es variable.

Lo que no es variable es tu tipología. Esta carcasa en la que viene tu esencia es fija, porque tus huesos, tu carne y tus rasgos son tu identidad fisiológica. Aparte de ello, tienes una esencia, solo tuya, inimitable. Está en tus gestos, tu mímica, tu mirada, tu voz, tu postura.

Para crear su guía de estilo, David Kibbe tuvo en cuenta los dos aspectos y los identificó a través de un concepto tan simple como las energías yin y yang

Las energías yin y yang están en tus huesos y tu carne, pero también en el movimiento y funcionamiento de tu cuerpo.

Si alguna vez te has preguntado por qué algunas prendas te sientan bien y otras no, la dinámica yin-yang es la clave. Por este motivo, es imprescindible conocer tu cuerpo en detalle para poder tomar mejores decisiones de estilo.

Para evidenciarlo, imaginemos tu relación con la moda después de conocer tu morfología Kibbe. 

Esto es lo que va a pasar una vez descubras cuál es tu tipología Kibbe:

… será todavía más placentero. Sabrás a qué tiendas ir y qué prendas elegir.

… será más fácil. Irás a lo seguro. No habrá tantas frustraciones con el pedido, ni devoluciones de prendas que decepcionan.

… te lloverán cumplidos (aunque los tuyos serán los más importantes).

… porque tu personalidad tendrá mucho peso en la elección de tus conjuntos.

Testimonios reales

El estilo de muchas mujeres ha dado un salto impresionante después de conocer su tipología Kibbe.

Aquí puedes ver algunas opiniones de mis clientas:

 

El mundo de Kibbe no es perfecto pero...

Es de los pocos que tienen en cuenta la esencia personal de cada mujer. Esa esencia se basa en las energías yin y yang de tu cuerpo, porque eres una mezcla de feminidad y masculinidad. 

La primera es romántica, sensual o delicada e inocente, mientras que la segunda es misteriosa, imponente, fuerte y ambiciosa.

A mí me encanta este nuevo enfoque. ¿Y a ti?

Este sistema se creó en torno a la complejidad de tu cuerpo y la unicidad de tu personalidad. Por eso, es como una boca de aire fresco en el mundo de la moda.

Si quieres hacerme una consulta o solicitar un servicio de Análisis Morfológico y Esencia, escríbeme. ¡Me gustaría conocerte!